lunes, 13 de agosto de 2007

Buscando piso

Hemos tenido una semana completita. El martes fuimos a un concierto de música clásica, en un patio interior en la zona antigua. Los músicos no eran geniales, pero lo hicieron bien, y la mezcla de música clásica antigua y contemporánea estuvo muy bien.


También hemos celebrado esta semana que ha hecho dos años que empezamos a salir. Aparte de esto no hemos hecho muchas actividades más en la ciudad, pero hemos paseado un poco (menos los últimos días, que ha hecho malo), hecho algunas compras, y, lo más importante, empezado a buscar piso.

Ya teníamos un par de páginas web con anuncios, pero todas en alemán, así que no nos habíamos animado. Pero ya va tocando, que queremos mudarnos a final de mes, así que me puse a buscar los anuncios de pisos de alquiler. Con la ayuda del traductor de Google, en un rato ya me había familiarizado con las palabras clave, y acumulé unos cuantos anuncios en el ordenador.

Un compañero muy majete llamado Georg, que me ha ido aconsejando estos días sobre varias cosas, me dijo que comprara el periódico el sábado y llamara por teléfono, porque los apartamentos buenos no duran mucho. Así que eso hicimos. En varios casos, la conversación fue:

Yo (en alemán sacado de Google): Buenos días. No hablo alemán, ¿habla usted inglés?
Respuesta: Nein...
Yo (en alemán): Gracias. ¡Hasta luego!

Pero un par contestaron que sí, y quedamos en ir a ver uno por la tarde. La zona estaba muy bien, al lado del Danubio (por ahí está la parte vieja, hay restaurantes, etc.) y del tranvía, con lo que para mí serían 20 minutos de casa al trabajo. Además, el piso, reformado en un edificio antiguo, era grandísimo, con dos dormitorios donde cabían ¡cinco o seis camas de matrimonio en cada uno! Pero claro, era bastante caro. Hemos hecho números, y cuando Rana trabaje no tendremos ningún problema, pero no queremos pagar mucho por algo que no necesitamos. En fin, al menos nos quedamos con la buena impresión de que el primero que vemos no es un piso de esos nuevos, pequeñitos e impersonales.

Mañana lunes vuelve mi jefe de vacaciones, así que supongo que empezaremos ya por fin en serio. Claro que yo andaré llamando y yendo a ver pisos, así que los primeros días ya veremos cómo vamos.

No hay comentarios: