Las autoridades bolivianas confirmaron el interés, no solamente de los japoneses, sino de franceses y chinos en la explotación del litio. Sin embargo, cualquier acuerdo está no solamente en manos del Gobierno, pues, de acuerdo con la nueva Constitución Política del Estado -que se promulgará hoy [sábado 7] en La Paz-, serán los pueblos indígenas de la región los que decidan si aceptan o no esta explotación y las condiciones económicas que más les beneficien.
Es decir, aquellos afectados más directamente por este tipo de acuerdos tienen el poder de decidir. Esto es un concepto fundamental, que encuentro muy justo, y que ya he visto antes: hace unos meses tomé un curso online en ZNet sobre economía participativa, y precisamente ese era uno de los principios. Que algo así quede plasmado en una constitución es algo muy positivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario