No he tenido tiempo de sentarme a contar la gran noticia: hace ya casi dos semanas nació mi hija Riim.
Entre el tiempo de hospital y las nuevas rutinas en casa, ando distraído, como en una nube (en parte por el gran cambio, en parte por la falta de sueño). En realidad pensaba que me iba a costar más la ruptura de las rutinas habituales, las prioridades que cambian, etc. aunque igual es todo muy nuevo todavía. En cualquier caso, estoy muy feliz. Tener al lado a una nueva persona que sólo quiere un par de cosas en esta vida, y tú que le ayudas a que las consiga, es algo que da mucha paz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Padrazo!!
Publicar un comentario