Dos películas

Hace pocos días vi The hurt locker, una de las ganadoras de los últimos Óscar. La película me entretuvo, está muy bien hecha en el aspecto de la tensión. Pero hay algo que le falla, como a muchas otras películas de temática parecida: me resultó muy difícil establecer un vínculo con el protagonista. No se explica su locura a la hora de jugársela: simplemente es así. Estas cosas me recuerdan a lo que Miguel Gila contaba:

Y vino Sherlock Holmes y dijo: - Ha sido Jack el destripador.

Y dijimos: - ¿Cómo lo sabe?

- ¡Porque soy Sherlock Holmes y a callar todo el mundo!

Eso es un poco la parte cinematográfica, porque claro, también se puede pensar en el aspecto político... y ese me pareció mucho más claro: los iraquíes que salen son básicamente fantasmas que se ven de pasada, los soldados estadounidenses tienen todos muy buen corazón a pesar de ser muy violentos, etc. He leído en la wikipedia en inglés que muchos veteranos han dicho que la realidad no se parece en nada a la película, excepto en la parte más técnica, trabajar desactivando bombas y eso. Qué le vamos a hacer, me resulta difícil ver una película de guerra y no pensar en cómo los pobrecitos soldados lo pasan fatal, pero de las víctimas civiles (de esos soldados), ni mu. Para una visión distinta de los veteranos de Iraq, recomiendo ver En el valle de Elah

Por otra parte, hoy he visto El verdugo de Berlanga en 1962. Esa película me ha dicho más acerca de los soldados, los civiles, y todos los demás, que cualquier película sobre cualquier guerra.