domingo, 8 de marzo de 2009

Rectitud

Ayer fuimos a la fiesta de cumpleaños de un amigo en su casa. Hablando de esto y aquello, alguien comentó que en Singapur no puedes comer chicle (allí no venden, y Rana cree que no dejan a los de fuera meter en el país). También se comentó que ponen multas por tirar cualquier basura al suelo.

Alguien dijo que Singapur es como un caballo que lleva tapados los ojos a los lados; sin imaginación, sin mirar a los lados para ver algo nuevo. Aburrido.


La paja en el ojo ajeno. ¿Tan malo es lo que hacen en Singapur? ¿Es aburrido no tirar basura en la calle?

Hoy, recordándolo con Rana, me vino a la mente que cuando estaba en Canadá comentando a amigos y conocidos que me mudaba a Austria, muchos de ellos entendieron que me mudaba a Australia. Me pregunto si sabían dónde está ese pequeño país que es Austria; que no es tan pequeño en sí, pero se pierde de vista entre muchos otros países. Indistinguibles de los alemanes, en la mente de mucha gente... Como cuando yo decía en Canadá que soy de Madrid, porque un canadiense no va a conocer Cáceres, sólo Madrid y Barcelona. Como aquellos que...

¿La viga en el ojo propio?

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